jueves, 7 de noviembre de 2013

El cierre de RTVV un mal precedente, además de un garrafal error político.


Amén, de que quién acuerda el cierre de RTVV se queda sin sus principales órganos de difusión o propagandístico si se prefiere, preveo que les saldrá caro en las próximas elecciones, con independencia de que la cuestión acabe en cierre ,o lo más seguro en una externalización hacía alguien afín.  Al fin y al cabo es un órgano que se controla desde el Gobierno o su mayoría parlamentaria porque es su editor. El cierre de un ente público, en definitiva, de un servicio público, es un mal precedente para todos. 

Todos hemos oído campanas sobre supresión de órganos judiciales, como los Juzgados de todo tipo, o de servicios como los de actos de comunicación,  cuando no hemos visto supresión directa de plantillas en nuestra propia administración, y pesa sobre nuestras cabezas la externalización, o más crudamente la privatización de servicios, que sabemos perfectamente que son más malos y más caros. Históricamente siempre lo han sido.

Lo peor es que parece que tengamos gobernantes de una inconsciencia poco habitual. Ya advirtieron que de prosperar el recurso judicial contra el ere de RTVV, cerrarían canal nou, y además procedieron según la sentencia en cuestión, sin guardar las más mínimas formas en la tramitación del mismo, de tal forma que aparece como caprichoso el proceder en el mismo.

Es además como poco preocupante, que los únicos sindicatos que al parecer no se revelaron contra el mismo fueron Uso, que no tiene ninguna representación en esta Comunidad, y Csif sindicato mayoritario en nuestro Sector en esta Comunidad, pues aparecen en la sentencia que adjuntamos enlazada por un periódico  como demandados, que aunque sabemos que es por obligación, lo cierto es que no reclamaron contra ese expediente de regulación de empleo que sufrían empleados públicos como nosotros.

No sé que dirán ahora, ni que argumentos esgrimirán, únicamente conozco los hechos que son públicos hasta el día de la fecha. De poco me sirve que digan a gritos que ese ente público es necesario, porque por lo visto no estaban, salvo que se demuestre lo contrario, defendiendo a los trabajadores despedidos cuasi caprichosamente. A lo mejor igual nos cuentan que sabían que el final era ese en el supuesto de que se admitiera el recurso, pero daría que pensar que más sabían.

Lo cierto es que la imagen que se ha dado, es que un sindicato que dice defender los intereses de los empleados públicos, no ha estado a la altura, y si eso es lo que vamos a tener aquí, apaga y vámonos.