A finales de este mes habrán pasado quince meses desde la aprobación de la bolsa de trabajo. Fue mi última negociación en el sindicato, y desde entonces no ha ocurrido nada que se pueda llamar así. La última bravuconada de algún sindicato arrogándose que se debe a ellos que no se recorte el horario y las retribuciones a interinos causa vergüenza ajena. La nueva normativa de bolsas se publicó el pasado 30 de septiembre (nueve meses más tarde) y hoy todavía no se ha convocado.
Se podrá discutir, pero no conoceremos su eficacia hasta que no entre en funcionamiento, y eso sólo tiene un responsable. El sindicato que yo dejé en esta Comunidad, ahora no acredita tablas suficientes para que se convoquen las bolsas, y además parece haber renunciado, vista su petición de que se aplique sin convocatoria, que como poco resulta algo extraño. Al menos hasta ahora no había ocurrido nunca. No es de extrañar después de un año de “así no” no me movilizo, así tampoco y después menos, hasta que no han tenido más remedio.
En contra de lo afirmado por más de uno, he de insistir en que hubo negociación real pues se inició prácticamente en octubre y se cerró a finales de diciembre de 2010. Hubo propuestas bastante innovadoras de algún otro sindicato, aunque a mi entender poco claras y todavía menos convincentes para el interés del servicio y del personal afectado.