lunes, 30 de mayo de 2011

La Nueva Oficina Judicial llega a la Comunidad Valenciana

Escama que nadie haya abierto la boca sobre este tema, a pesar de que el pasado 16 de mayo el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana publicó la Orden de Estructura y relaciones de puestos de trabajo.

Aunque la Administración valenciana ha negado una y otra vez que fuera a ponerse en marcha esta reforma, los hechos indican otra cosa. Es evidente que la nueva oficina judicial es la excusa perfecta para echar mano a nuestras escuálidas plantillas. La escasa oferta pública de empleo en nuestro ámbito, y un concurso que ni de lejos ofrece todas las vacantes existentes no auguran nada bueno.

La Orden establece la creación de determinadas comisiones para su implantación, y concretamente la Comisión Jurídica Asesora de Seguimiento, de la que forman parte un miembro de cada organización sindical representativa en nuestra Comunidad, ya se debe haber constituido. Sin embargo no tenemos noticias de ello.



Relaciones de puestos mal dotadas, aplicaciones informáticas que no funcionan adecuadamente, burocracia por un tubo, expediente digital para dentro de cuatro años, etc., están provocando un aluvión de críticas desde todos los sectores afectados.

Únicamente la maquinaria mediática de propaganda política, y algunos funcionarios que sienten que se verán beneficiados apoyan esta reforma, donde la productividad acaba cobrándola siempre el Jefe, eje sobre el que radica el fracaso de muchas Administraciones.

Una reforma que no ha contado en su diseño con los principales actores, es decir, con quienes estamos en el “tajo” todos los días no puede acabar bien, y no puede darnos lo mismo porque está en juego  nuestro puesto de trabajo, nuestras retribuciones, y nuestro futuro y con ello el de nuestras familias.

Esto hace más que necesaria la participación de todos, con la exigencia de unidad de acción sindical, imprescindible, sin flojeras, partidismos ni actos de mera propaganda o comparecencia.

Es fundamental la participación de los funcionarios más expertos y de mayor prestigio en las comisiones que se creen para la implantación en sus diversas fases. No se puede dejar en manos de la Administración o en intereses partidistas la designación de los que hayan de formar parte de las mismas. Para ello se ha de articular la forma de que sea el consenso de los propios trabajadores de los diversos centros los que decidan al respecto. Todo ello, sin pantomimas, sin mirar para otro lado, y sin desviar la atención.

Puedes encontrar la orden pinchando el enlace de la derecha dentro del menú Nueva Oficina Judicial.